5 errores de marketing internacional a evitar
Sólo un par de errores de marketing internacional pueden hacer tropezar todo tu negocio. Por eso, es importante conocer cuál es su origen e incluso las iniciativas más prometedoras para poder sortear estos obstáculos. Así que, ahora te vamos a contar algunos de estos errores para que tu aventura internacional sea todo un éxito.
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5 errores de marketing internacional
1. El primer error del marketing internacional, no posicionarte ante un público potencial
Esta es la función esencial del marketing. Si no la estás teniendo en cuenta, ya estás empezando con el pie izquierdo. Para poder posicionar tu producto tenés que saber quiénes son tus compradores potenciales. Saber qué les interesa, saber cómo compran. Pero sobre todo, intenta de captar su atención, presentarte como una mejor alternativa a la competencia posible y ganarte su compra.
No basta con tener en tu página de Internet la sección «Quiénes somos». Un buen consejo que podemos darte es humanizar tu marca: conta tu historia y busca el sentimiento del consumidor. Esto debe hacerse siguiendo una clara estrategia de contenidos, que pueden ser virtuales o físicos. Pero, primero tenés que convencer a tus usuarios de que los productos o los servicios que vendés les pueden interesar: sólo así te van a localizar y podrás ofrecerles tu producto.
2. No tener perspectiva local, el más común de los errores de marketing internacional
Muchas empresas pierden la noción de que deben insertarse en una nueva cultura, uno de los errores de marketing internacional más comunes. Eso genera una falla en la comunicación muy difícil de remontar: aunque hables el mismo idioma, siempre hay distintas maneras de hablar. Si no podés interpelar a tus potenciales compradores, tus ventas no van a crecer. Por eso es importante tener perspectiva local.
Contar con un equipo de marketing nativo que conozca la cultura y el mercado local puede salvarte. Eso es posible desde tu país, ya que siempre podés acudir a expertos en comercio internacional que podrán ayudarte con todos los procesos.
3. No identificar la esencia de tu producto
En el marketing internacional, no es necesario abandonar por completo la estrategia que ya usás en tu propio país. Pero sí, hay que centrarse en el valor único de tu producto. No sólo debés tener en cuenta los motivos por los cuáles despierta interés en el exterior, sino también por qué interesa «acá». Es importante conocer lo que funciona mejor, ya que aquello que generó tu éxito a nivel nacional puede ser adaptado en el exterior.
A veces, inclusive la esencia de un producto puede ser redefinida por tus consumidores. Puede pasar que creas que tu producto se define por A, pero la gente percibe su valor en B. En ese caso, es necsario que seguir esa mirada. También es importante saber utilizar tu nacionalidad: los consumidores saben qué productos importados de tu país son buenos, como por ejemplo las exportaciones argentinas, y eso hay que tenerlo en cuenta.
4. Sobreponer la cantidad a la calidad
Emprender en el exterior es una aventura muy tentadora. Por eso, hay gente que quiere empezar a toda costa a lo grande. Desde el principio con muchos artículos, búsquedas, campañas… Pero esta estrategia es tan riesgosa como tentadora. Por ello te aconsejamos ir de a poco y hacer foco en brindar un servicio de calidad.
Tu desembarco no debe ser un agresivo abordaje como el de los piratas o un bombardeo de información sin contexto. El contexto lo percibe (y genera) la gente: ellos ven tu producto en las tiendas, en Internet y con eso pueden recordarlo y hacer el enlace con la publicidad. Por eso, los productos deben ser de calidad. Una buena primera impresión puede darte años de éxito comercial.
5. No aprovechar todos los canales de comunicación
El marketing de contenidos no tiene que ser tu única estrategia. Para eso, lo mejor es apostar a tantos números como sea posible, como si fuese en la ruleta. Por eso, te recomendamos no cerrarte a un solo medio, sino abrirte a varios persiguiendo un fin común. El despliegue de una campaña que llegue a más lugares que por Internet, es clave.
Y dentro de cada medio, hay que identificar a tu comprador ideal (como dijimos, uno de los errores de marketing internacional más repetido). ¿Es alguien que mira videos? ¿Es alguien que lee catálogos? ¿Lee el diario? ¿Está metido en las redes sociales? Evidentemente, otra vez, no podés perder la perspectiva local.
En este sentido, es importante contar con el consejo y guía de expertos, como quienes trabajan en E-comex. Sólo alguien que haya tenido éxito en el posicionamiento de un producto en el exterior podrá ayudarte con certezas. Sobre todo, si también está incluido en el resto del proceso de internacionalización de tu marca: esa es la mejor manera de evitar errores de marketing internacional.